Aunque el estudio de idiomas genera más beneficios a temprana edad, nunca es tarde para comenzar a aprender idiomas. Todas aquellas actividades en las que ejercitamos el cerebro son productivas a la hora de mantener una mente activa y alerta ya que ponemos a trabajar las diferentes zonas de la mente.
Ya sabes, si no hablas un segundo idioma, considera aprenderlo como una inversión no sólo en tus estudios o carrera, sino como una mejora en tu salud a largo plazo. Tu cerebro lo agradecerá.